Una generación en abandono
Con el pasar de los años lo único que deja la vida son los recuerdos gratos de la juventud y la familia, el pilar central en el que abundaba el amor eterno, incondicional, y sobre todo, el apoyo en los buenos y malos momentos; pero cuando la vejez toca la puerta, esta condición se convierte en un impedimento para quienes hasta entonces estuvieron ahí recibiendo vida, cariño, educación y un sin fin de sentimiento que dejan de valorar. Aparece un mundo de abandono, de enfermedad, de tristeza y de desprotección, en al que no importa el fin. Tras estos desprecios, abundan también las almas bondadosas, quienes los acogen con cariño y suplen la ausencia prolongada de su familia.
El abandono en adulto mayor es algo que se ve a diario debido a las dificultades y problemáticas que presentan por su condición física o psicológica, teniendo en cuenta que en esta etapa sus cuidados aumentan y se convierten en seres más vulnerables frente su entorno. No es un secreto que en esta etapa de la vida dejan de hacer actividades por cuenta propia, se pierden las oportunidades de trabajo, no existe una colectividad y procesos sociales, y por esta y otras razones los familiares tienden a abandonarlos en clínicas, a la intemperie o en centros geriátricos, de tal forma que la responsabilidad pasa a ser parte del mismo adulto o de terceros quienes regulan y hacen el acompañamiento al adulto.
El abandono en adulto mayor en Colombia presenta un crecimiento anual de 3,5% en las edades de 60 años en adelante, siendo la soledad, la falta de atención y el abandono, los problemas pilares para acudir a fundaciones y hogares geriátricos. Esta situación se agudiza en un 57% de 60 años a 69 años; 30% de 70 años a 79 años; y de 80 en adelante, un 12%. Los departamentos que más presentan esta problemática son Cundinamarca (Bogotá), Antioquia y Valle del cauca. En Bogotá fueron abandonados en redes hospitalarias 1.151 adultos, la cifra total es aún más alarmante: 902.000 en toda la capital. Los altos índices más altos se presentan en las localidades de Kennedy, San Cristóbal, Engativá y Bosa.
En Colombia encontramos profesionales comprometidos por velar por el cuidado de los adultos mayores, quienes hacen su mayor esfuerzo para brindarle lo que sus familias no han hecho por la falta de interés, compromiso y calidez humana. Entre ellos se destacan los médicos, enfermeros, abogados, comisarios de familia y voluntarios, quienes han ayudado a restaurar su autoestima, mejorar las condiciones de salud y generar más credibilidad en varios aspectos.
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SABIDURÍA EN TERCERA BASE
Por lo general, se considera adulto mayor a toda persona con 65 o más años, esta etapa de la vida se caracteriza porque se sufre con mayor impacto el deterioro de la salud y de las funciones biológicas, además, representa cambios psicológicos y sociales. Por esto, las personas de la tercera edad comienzan a generar dependencia de quienes los rodean, pues realizar por sí solos las labores que desempeñaban fácilmente en su cotidianidad se convierte en un reto cada vez más grande.